Buenos hábitos, desde el inicio
Una nutricionista, un psicólogo y un técnico deportivo ofrecen un programa contra la obesidad y el sobrepeso infantil.
Crear el hábito de comer de forma equilibrada y hacer ejercicio puede resultar complicado para los adultos de vida sedentaria y alimentación desordenada, pero lo es mucho más para los niños con paladares golosos o que se alimentan exclusivamente de determinados grupos de alimlucensesue son los únicos que les gustan. También para los que tienen problemas de peso y, en consecuencia, de autoestima. A ellos va dirigido el programa que han puesto en marcha la nutricionista Lidia Carballo y el psicólogo Samuel Villar de la Clínica Dinán y el técnico deportivo del gimnasio Disom Francisco Rodríguez. Carballo puntualiza que, aunque el nombre aluda a la obesidad, un niño delgado que no quiere comer también tendría cabida en el programa. Este tiene el objetivo último de ayudar a crear un nuevo estilo de vida que integre una alimentación variada y completa, actividad física y una percepción positiva de la propia imagen, así como herramientas para actuar ante los problemas que surjan con la comida.«No se busca poner al niño delgado y nada más, la idea no es ponerle una dieta restrictiva, sino que cambie de estilo de vida y para eso es imprescindible implicar a los padres», apunta la nutricionista.El programa tendrá un precio de 50 euros mensuales e incluirá dos sesiones de gimnasio con un técnico en la que se recomendarán ejercicios y claves para perseverar en la vida activa; una consulta con la nutricionista y una sesión grupal para niños y otra para padres. Los mayores abordarán con el psicólogo cómo hacer frente a situaciones como rabietas de los pequeños a la hora de comer o la negativa a probar algunos grupos de alimentos. Los niños trabajarán la autoestima y la confianza.Está diseñado para que se prolongue durante todo el curso escolar y que, en ese tiempo, el niño sea capaz de modificar sus hábitos.Carballo, que asesora en nutrición a distintos comedores escolares, señala que la principal preocupación de todos los progenitores es que el niño coma y que, para asegurase de que lo hace, se evitan alimentos básicos como la verdura o se combinan mal. En otros casos, se ofrece exceso de comida.
Niños gallegos Cerca del 40% tiene sobrepeso La nutricionista Lidia Carballo recuerda que entre el 30%y el 40% de los niños gallegos tienen sobrepreso u obesidad, un porcentaje que se reproduce fielmente en Lugo. En su trabajo de investigación sobre los hábitos de alimentación de los niños iucenses —en el que entrevistó a 600 escolares— encontró que entre el 60% y el 70% de los niños solo comen una ración de verdura o fruta al día y coincide con la que le dan en el colegio. Niñas y deporte Otra de las cuestiones que detectó el trabajo de Carballo fue que las niñas, y especialmente las que vivían en la zona rural, apenas practicaban deporte. En ese caso se debía fundamentalmente a la falta de alternativas que les resultasen atractivas. Mientras que los niños querían jugar al fútbol, las niñas no solían tener interés por ese deporte. La combinación de alimentos era otro problema evidente, dado que la mayoría cenaba «algo de proteína con patatas fritas» y solía comer algo muy similar.
